"El polo se adapta a todas las situaciones. Cuando quiero llevarlo más formal, elijo un polo de cocodrilo tono sobre tono y me lo meto por dentro del pantalón". Matthieu Maury, productor

"Cuando era pequeña, ya solía llevar un polo de adulto demasiado grande para mí. Es mi forma de sentirme femenina: ni demasiado mujer, ni demasiado hombre, sino justo entre los dos". Carmel Loanga, bailarina.

"El polo se puede transformar de manera sencilla gracias a su cuello. Me gusta llevarlo en dúo y abrochar las dos partes para fijarlas. Con tantos colores disponibles, ¡las posibilidades son infinitas!" Jacques-Alix Brice, bailarín.

"Para mí, un polo es una pieza que hay que llevar sin desvirtuarla. No puedo evitar asociarla con piezas de buena factura, como un cuero suave o una tela vaquera sin tratar muy gruesa". Somalia Barro, estilista fotográfica.

Elige el bordado característico: el cocodrilo o la caligrafía Lacoste.